Peña Mingubela

Ojos Albos es una pequeña localidad con muchos encantos. Uno de los grandes secretos que esconde y que ni si quiera muchos abulenses conocen es que, en su término municipal, se encuentran unos yacimientos arqueológicos prehistóricos. En concreto se tratan de unas pinturas rupestres, que se ubican en lo que se conoce como Peña Mingubela.

En 1974, Ángel Sánchez de la Cruz, descubrió las mismas, y se lo comunicó a Álvaro Bobadilla quién difundió el hallazgo. No obstante, se dice que en el pueblo ya eran conocedores de ello, y que se habían cuidado de no hacer gran difusión por miedo a que las deterioraran.

Las pinturas están consideradas como “un abrigo único, dentro de la pintura esquemática del Sistema Central”, en palabras literales del catedrático Francisco Javier González-Tablas Sastre, realizador, hasta la fecha, de prácticamente, el único estudio pormenorizado de las mismas. Consta de treinta y una pinturas de varios momentos históricos diferentes. Las primeras pinturas parecen datar dentro del Bronce Final en el 5.000 antes de cristo, en esa época parece que el abrigo sirvió como refugio de pastores durante la estación estival, ya que la zona es inhabitable en inverno. Mientras que, en la segunda fase de las pinturas, se cree que el abrigo perdió su condición de refugio para pasar a ser un monumento conmemorativo de las campañas de Aníbal en la Meseta desde Catago Nova (Cartagena), hacia la zona de Salamanca.

Para visitar el yacimiento hay que hacer una ruta a pie de aproximadamente una hora, que comienza en los atrasos del pueblo, campo a través, hay que seguir un camino de tierra dirección sur, durante al menos dos kilómetros, hasta las inmediaciones del Arroyo Valdeáguila. Para encontrar el abrigo hay que buscar un espolón rocoso de cuarcitas micáceas que tienen una ligera orientación nordeste.

El paseo merece la pena para visitar algo excepcional y todavía poco conocido, de la orografía de Ojos Albos. Actualmente, el consistorio de la localidad está tratando de poner en valor el patrimonio histórico de la misma y ya en este enclave se han realizado rutas comentadas por expertos arqueólogos e incluso dentro de las jornadas de arqueoturismo de la localidad  conciertos nocturnos, con espectáculos de luces, que han permitido disfrutar del enclave de una forma única.